domenica 17 febbraio 2013

micro relato 2


                                                                           

                                                                               Constelación





La abuela de Manuel se sirve fideos y deja en la fuente la mejor parte: la que tiene más salsa y más queso cree Manuel. Abuela Irma solo piensa en terminar de comer para ir a su habitación y ver la novela.  Se la nota ansiosa y casi no habla, su nieto en cambio  no para de alabarla por la rica comida y por como tiene de limpia la casa. A la abuela Irma le encanta tenerlo de visita, le gusta saber como está y compartir la cena, pero desde hace un tiempo la novela la ha hipnotizado y en su trama se descose su historia. Arma y desarma los recuerdos con el abuelo Andrés que hace tanto no está cerca suyo.  Abuelo Andrés había sido bancario y  un músico de entre casa, y ella habia amado siempre lo potencial de su ser. Eso lo deduce Manuel, que no se lo dice. La novela alimenta ese sueño de ser lo que no fue, de ver ser al abuelo Andrés lo que no fue. Y el amor esconde bajo las telas de araña cúmulos de fisuras y desencanto. También el amor es un pensamiento y también lo es una cena tibia.

micro relato 1


                                                                               Pulsión




La carretilla no funcionó y entonces el hombre se tuvo que poner a pensar de qué manera trasladaría los escombros. Se sentó al costado del camino y encendió un cigarrillo, el sol le daba intensamente en la cabeza y dificultaba  los pensamientos. Así y todo decidió utilizar los elementos que le brindaba la naturaleza para arreglar las ruedas de manera rudimentaria. Encontró dos palos gruesos y fuertes y una roca mediana que le serviría de martillo, solo faltaba definir como ataría la rueda. El paisaje agreste no le proporcionaba lianas ni pastos largos.  Tendría que sacar de sí, y utilizó un cinto maltrecho, por lo que tuvo que doblar de forma extravagante y frágil su pantalón. Le llevó dos horas hacerlo, luego se paró  cerca de su compostura y respiro. Tomó los agarres de a carretilla y puso a prueba el aparato. Vio que funcionaba y que poco a poco avanzaba en el camino que había sentido interminable.  Tiempo después estaba en el pueblo tomando una cerveza con sus amigos que eran tan borrachos como él y que al igual que él estacionaban sus carretillas en la veredita del bar.

domenica 10 febbraio 2013

Espectro

      1.

      Otra vez la lluvia. Otra vez la lluvia.

Aves en celo con el profundo destino del aire.

      El celeste cercano o por perderse.


                                                                 
            2.
   
            Antes de la primavera
                los fideos y el mate cocido.
.
                    Goce del cuerpo en la tibia luz invernal, 

                    con el frìo en las nalgas gimiendo y amando.


         
 
 3.

 Solo así se derrama lo próximo o lo verdadero.

   Bananas en flor,

 tu niño las mira cada día para ver si se ponen maduras.

            El porvenir nos encuentra sudando rocío.


                                
                  4. 

                   Los magos pasando por el desierto.

                      - Credo y olores-
                                                                                               
                        Incendiando la arena.

                          La historia del tiempo sin fotografías.

lunedì 4 febbraio 2013

El celeste de algunos pájaros –



 De las corrientes subalternas y de algunas miradas unidas que antes fueron esquivas, surge el lazo ondulado que aprieta la risa. Serpiente de un árbol nuevo, venido de los racimos de uvas en desecho. Nada la serpiente en cause al estomago del sol. Nada desde la urdimbre de las cosas primeras y de los nombres de las cosas primeras, las primeras apariciones de la conciencia cósmica. Subterránea conciencia del recuerdo, del presente y de los próximos amaneceres. Los nombres reales serán los ancianos de luz. Los nuevos enormes pájaros nos llevaran encima de los cielos castaños, de los cielos de pausa, de las animosas nubes.


 De la corriente subalterna del caos que ven tus ojos cansados emergerá la unicidad entre muebles, peces, monedas, helechos, figuras planas y movibles, cencerros y marionetas. De esa corriente que conmueve en el sentido más práctico la vida del Maestro, de esa corriente las nueces encendidas serán señal de entrega.


Todos en ceremonia, inclusive el pájaro gigante y el torpe soldado, todos en ceremonia de honra. Todos con los brazos en alto tocando los grandes racimos. De la corriente subalterna de cualquier noche blanca surgirán las primeras vocales y los primeros gemidos y el sexo engrandecerá la médula y la nutrirá de su roja esencia, en la bulba de de la primavera y en la simpleza de un ocaso. Lo que circula en la napa transparente de las voluntades más poderosas se entregará como sales, elementales y plantas, animales y humanos harán su trabajo. Las jerarquías seguirán una tras otra las iniciaciones del amor eterno, sabiduría y entrega. Síntesis de la información de un clan, síntesis de las posturas del Kamasutra, de los goces de todos los hombres mientras se expandían en el orgasmo lunar. Nuevamente será la verdad lo que fue en Saturno y luego en Néptuno, lo que fue es en Sirio y en la antigua configuración del Universo.